El Imserso (Instituto de Mayores y Servicios Sociales) ha ofertado un nuevo programa de Turismo, para los viajes de la temporada 2025-2026, con casi 880.000 plazas de viajes en todo el territorio nacional, tanto costa como islas y turismo interior. Un proyecto turístico al que el estado aporta un valor total cercano a los 60 millones de euros.
Un lote de viajes que gestionan principalmente Ávoris y Mundiplan. La primera de ellas en el turismo de costa peninsular y escapadas, mientras que Mundiplan gestiona los lotes insulares. Y entre estas grandes gestoras agencias de viajes adheridas, como B the travel Brand, Halcón Viajes y Viajes El Corte Inglés, que venden los programas. Como lo ha hecho también Viajes Velero, en plena calle Barcelona de Salou.
Agencia esta última que desde varias horas antes de la apertura registró importantes colas de personas en los días que el Instituto marca a cada uno de los que desean viajar. Con la decepción de que a los pocos minutos de abrir las puertas las agencias, las nueve de la mañana, hora que coincide con la apertura de la web que concede los viajes, los destinos, a pesar de la amplia oferta a nivel nacional, están agotados y es muy difícil conseguir plazas.
Aun así, siempre hay la oportunidad de conseguir una de estas plazas, como la que ha tenido la fortuna de conseguir el que les escribe, que ha pasado estos últimos días en Cantabria, donde he visto, aunque un poco alejado, el Palacio de los Hornillos, residencia en la que se rodó la película Los Otros. Una cinta hispano-estadounidense de 2001 dirigida por Alejandro Amenábar y protagonizada por Nicole Kidman que ganó 8 de los 15 Premios Goya.
El viajar de las personas mayores, entiéndase como tal los que los hacen con el Imserso se ha convertido en un fenómeno por el creciente número de personas de la tercera edad que viajan por ocio, mejor salud y mayor poder adquisitivo, impulsados por la jubilación, convirtiéndose en un segmento importante del mercado turístico. Este grupo, conocido como generación silver (conocida por la economía plateada o el cabello canoso), busca experiencias nuevas, lo que está transformando el sector del turismo, a pesar de que se enfrenta a barreras tecnológicas o la falta de accesibilidad y movilidad en los destinos.
En estos viajes las personas mayores se mueven especialmente de forma individual, aunque muchos de ellos con algún amigo/a, por no tener pareja sentimental, con edades entre los setenta y ochenta años. Aunque es muy frecuente también ver parejas, y entre éstos algunas que superan los noventa años. Pasar tiempo con amigos es una de las principales motivaciones para viajar, por lo que no es de extrañar los beneficios que ofrece viajar a los adultos mayores, coincidente todos ellos en que es bueno para su salud mental y física.
Las personas mayores que más viajan suelen ser de países con una población envejecida y con recursos económicos, como Japón (por su gran porcentaje de personas mayores y su eficiente infraestructura) y países europeos como Italia, Alemania, España y Francia (debido a su cultura viajera y sus recursos). Otros grupos importantes son los de países como Estados Unidos y Canadá, que tienen una gran población de personas mayores con poder adquisitivo para viajar.
España, pues, se encuentra entre los países cuyas personas mayores tienen más ganas de viajar en Europa. La nueva generación ‘silver’ ha está cambiando las reglas sociales y redefiniendo el envejecimiento también está dando un vuelco al turismo. A pesar de que la imagen tradicional que se nos suele presentar del turista trata de una persona joven, con mochila a la espalda y en un destino exótico, si se tienen en cuenta los viajes que los españoles hacen en el interior del estado, elturismo de los mayoresyaha desbancado al resto de franjas de edad como el principal nicho de mercado.
La generación silver, este grupo demográfico que se caracteriza por ser activo, digitalmente conectado, con poder adquisitivo y un estilo de vida que incluye viajes, ocio y consumo, tanto tradicional como online, redefine la idea tradicional del envejecimiento, mostrando vitalidad y ganas de disfrutar la vida con recursos económicos y tiempo disponible. Unas características que le invitan a moverse por destinos muy distintos, aunque en estos casos esté supeditado a ofertas como las que plantea el programa del Imserso.
Las personas mayores que viajan, según las agencias especializadas, prefieren destinos con buen clima, naturaleza o playas. Tienden a organizar viajes más largos que otras generaciones y disfrutan de la socialización y la tranquilidad, aunque la organización y adaptación a sus necesidades (como alojamientos adaptados y ritmo más pausado) es clave para la elección. Por estos motivos no es de extrañar que los destinos preferidos de los españoles de avanzada edad son los de costa peninsular, como Benidorm, y las Islas Canarias, especialmente Tenerife, Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura. Así como otros destinos populares que incluyen las Islas Baleares (Mallorca, Menorca e Ibiza) y los circuitos culturales de interior, que están ganando popularidad. Circuitos culturales, cada vez más demandados, que ofrecen visitas a ciudades con riqueza histórica como Madrid, Sevilla, Granada o Córdoba o Circuitos de naturaleza, con destinos como La Rioja, Navarra, Cantabria o el País Vasco, que son cada vez más solicitados por quienes prefieren la naturaleza y el senderismo.
Durante estos días entre personas mayores, por cierto, con algunos catalanes con los que hemos coincidido, rodeados entre montañas de la cordillera cantábrica, permite ver que los acompañantes son personas generalmente activas, que buscan confort y seguridad. En este caso con muchas ganas de disfrutar de programas de salud, en un balneario, conocer la naturaleza entre hermosos paisajes y rodeados de gente que preferentemente valora la cultura y la gastronomía.
En una comunidad que te permite disfrutar de la salud, de la gastronomía, de hermosos parajes con valores naturales únicos por su flora, fauna, geología o belleza paisajística, pueblos medievales con gran historia y hermosura arquitectónica como el municipio de Cartes. O el comentado pueblo de Las Fraguas, donde el visitante es otro entre Los Otros, disfrutando de la cultura y de ese espacio natural verde que se contempla con una cierta admiración, al pensar como pudo ser la escena que llegó a seducir a Nicole Kidman, al protagonizar el argumento que la trasladó al año 1945, al terminar la Segunda Guerra Mundial, en el que Grace, la protagonista, esperó sobre aquella hermosa alfombra de césped verde natural el regreso de su esposo, que se encontraba combatiendo en la guerra.
Las personas mayores tienen, o tenemos, necesidad de viajar, porque la generación del baby boomers, la cohorte demográfica que siguió a la generación silenciosa nacida entre 1946 y 1964, durante la explosión de natalidad posterior a la Segunda Guerra Mundial, además de haberse descrito como una “onda expansiva”, se caracteriza por ser una generación trabajadora, comprometida y orientada al logro, habiendo crecido participando de un período de prosperidad y progreso de la posguerra, en una cohorte también valorada por la estabilidad familiar y económica, conservadora en muchos aspectos y pionera en movimientos sociales importantes en el tiempo. Y por todo ello, con “el cielo ganado”.
