Los tripulantes de la embarcación Figa Fosca, los hermanos Jordi y Carlos Rubio y Joshua Menè, han recibido en la mañana de este domingo el galardón que les acredita como ganadores del concurso de pesca de calamar, celebrado a lo largo de toda la semana en aguas de la costa salounse. Han capturado 75 piezas, con un total de 7.500 puntos, 2.000 más que su inmediato seguidor, el barco Sobre las Aguas. La embarcación que lleva el nombre de Salou ha quedado tercero.
Se da la circunstancia de que Carlos Rubio, patrón del barco ganador, y Jordi fabrican sus propios señuelos en Salou bajo la marca Garrapitas. Los venden a una veintena de tiendas en España y los distribuyen por Italia y Croacia. Se trata de un producto a base de resina que se fragua con rayos ultravioleta en 3D hasta formar una pieza con forma de pez muy luminosa para llamar la atención de los calamares durante la pesca. Dedicaron 20 años al estudio de su diseño y composición hasta que hace cuatro dieron con el formato y los materiales necesarios.
Durante el acto de entrega de premios, el alcalde de Salou, Pere Granados, ha afirmado que esta fiesta es “la más antigua del municipio y cada año aumenta su participación», y ha destacado que «es un emotivo homenaje a todos los pescadores que hubo años atrás en la vila».


«La próxima edición será su 50º aniversario y, coincidiendo con el año de Salou como Capital de la Cultural Catalana, nos entregaremos más que nunca a su organización, para hacerla mucho más brillante si cabe”, ha señalado Granados.
A continuación, los participantes en el concurso han recogido sus regalos y trofeos, y se ha organizado un excelente vermut para las más de trescientas personas que han asistido a la clausura de la fiesta del calamar en el Club Nàutic Salou.