Los Mossos d’Esquadra detuvieron el 6 de mayo en Vila-seca a siete hombres como presuntos miembros de un grupo criminal dedicado al cultivo intensivo de marihuana. La operación se saldó con otros dos arrestados en La Roca del Vallès (Barcelona).
La investigación se inició en febrero, a raíz de indicios sobre una posible plantación en una nave industrial de la Roca del Vallès que desprendía un fuerte olor a marihuana y presentaba un consumo eléctrico fraudulento.
Los agentes vincularon a uno de los sospechosos con una vivienda en Vila-seca, que compartía con otros hombres también relacionados con el cultivo y distribución de cannabis. La policía constató que el domicilio funcionaba como centro logístico y de coordinación de la actividad ilícita.
Los Mossos entraron en el inmueble el 6 de mayo y detuvieron a siete personas e intervinieron 4.000 esquejes de marihuana y más de 2.000 euros en metálico, además de documentación vinculada con el grupo.
Según la investigación, los detenidos formaban parte de una organización estructurada, con roles definidos: desde responsables de la logística y el transporte hasta encargados del cultivo en la nave de la Roca del Vallès, donde se localizó una infraestructura de tres plantas equipada con lámparas, ventiladores y sistemas de vigilancia.
El 8 de mayo, ocho de los nueve arrestados pasaron a disposición judicial. Uno de ellos quedó en libertad con obligación de comparecer ante el juez cuando sea requerido. Se les imputan delitos de pertenencia a grupo criminal, contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico.
