El Castell de Vila-seca alberga, hasta el 22 de febrero, la exposición La pulsió del temps, del pintor Joaquim Chancho (Riudoms, 1943), una de las figuras clave de la abstracción en Catalunya. La muestra recoge piezas representativas de su trayectoria y propone al visitante un viaje a la estructura esencial de su obra. Destacan cuadernos y libretas que el artista denomina “trabajos de mesa”.
La exposición, comisariada por Bernat Puigdollers, se inicia con tres pinturas de inicios de la década de los sesenta, y, a partir de ellas, el recorrido se va construyendo como una de sus obras, donde cada trazo conduce al siguiente, tejiendo una red de relaciones.
“Esta muestra es un retorno de Chancho al Camp de Tarragona. Son obras que reflexionan sobre su propio proceso de trabajo y contemplan elementos básicos de la pintura, como la mancha, el color, la luz, la vibración, el conflicto o el espacio”, explica Puigdollers.
El comisario remarca que en el Castell de Vila-seca “el público podrá entrar en las entrañas de su obra y, por tanto, contemplar un Chancho poco visto”.
La exposición es fruto del convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Vila-seca y la Fundació Vila Casas.