El Puerto de Tarragona y el Ayuntamiento de Vila-seca han inaugurado este viernes la restauración de la Torre de Virgili, una construcción defensiva del siglo XVI ubicada en La Pineda, cerca de los terrenos de la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) del puerto. Está catalogada como Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN) por la Generalitat de Catalunya.
Los trabajos ha contado con un presupuesto de 412.329,45 euros (sin IVA), financiados íntegramente a través del programa ‘2% cultural’ gestionado por el Ministerio de Cultura junto con los ministerios de Transportes, Movilidad Sostenible y Vivienda. Y han permitido consolidar la estructura y los elementos arquitectónicos de la tore, rehabilitar la fachada y adecuar los accesos exteriores.
El presidente del Puerto de Tarragona, Santiago Castellà, ha reivindicado el valor histórico de la Torre de Virgili, que “concentra buena parte de la historia de este territorio en los últimos siglos, desde la época de los ataques de piratas hasta la Guerra Civil, en el siglo XX”.
Por su parte, el alcalde de Vila-seca, Pere Segura, ha expresado su satisfacción por la actuación, destacando que sigue la línea de recuperación de otros elementos patrimoniales del municipio, como la Torre d’en Dolça o el Castell.
Las obras empezaron en agosto y han solucionado daños estructurales, como el desprendimiento de parte de la cubierta, así como la reforma de las plantas superiores.
La Torre de Virgili tiene planta rectangular de 5,55 por 6,60 metros, muros de unos 90 cm de grosor y una altura aproximada de once metros. La planta baja es de piedra picada, y el resto, de piedra y mortero con sillares en las esquinas. La cubierta es una bóveda de medio punto y en el tejado se conservan tres de los cuatro matacanes originales.
Construida como torre de vigilancia durante los siglos XVI y XVII, tenía como función principal el control estratégico del litoral ante ataques piratas. En el municipio de Vila-seca se conservan numerosas torres similares, debido a la presencia histórica de núcleos comerciales.
Perteneciente a la familia Ca Virgili, la torre fue reutilizada durante la Guerra Civil como punto de vigilancia del campo de aviación de La Pineda. Cerca de la edificación se conservan dos de las tres entradas del refugio subterráneo construido en esa época.