La eurovisiva Melody reunió a 12.000 personas este jueves por la noche en la plaza de las Comunitats Autònomes de Salou a pesar de las altas temperaturas. Durante casi dos horas, la cantante sevillana realizó un viaje musical por sus inicios, con temas como El baile del gorila y De pata negra, hasta llegar a sus éxitos más recientes como Parapapá, Mueve o Rúmbame, con cambios de vestuario, coreografías enérgicas y una conexión constante con el público.
Uno de los momentos más especiales llegó cuando Melody compartió micrófono con su padre, interpretando piezas llenas de sentimiento. También tuvo palabras especiales para los más pequeños y agradeció a Salou y a todos los que se desplazaron desde otros lugares para acompañarla.
Puso el punto final a la actuación con la canción que la llevó al festival de Eurovisión, Esa Diva, recibiendo una ovación clamorosa de un público que cantaba a pleno pulmón. El concierto era una de las citas más destacadas de las Nits Daurades.
Antes de subir al escenario, Melody fue recibida por el alcalde, Pere Granados, y varios concejales, y recibió como obsequio un perfume Salou Essences y un abanico con la serigrafía de las letras Salou, que lució con estilo durante buena parte de la actuación.